sábado, 26 de febrero de 2011

BALCONEANDO

* Esta es mi columna para el diario digital www.noticias.iruya.com esta semana

Cuando todavía no había logrado reponerme del shock que me ocasionó TELAM en su intento de homenajear a Cristina Fernández con motivo de su cumpleaños, me llamó la atención, por lo extremadamente acertado, el término que utilizó el presidente uruguayo Mújica para referirse a América Latina poco antes de su arribo a Buenos aires: “balconeando”.

Mújica, con esa astucia campechana y lúcida que le caracteriza, desgranó con acierto en la conferencia “A dónde van las economía del mundo y la región” que tuvo lugar la semana pasada en Punta del Este, una serie de puntos fundamentales para el futuro (incluso el presente) de los latinoamericanos. Destacaría de su intervención tres grandes rasgos: uno, su insistencia en la urgencia de que los países de la región se unan (no en encuentros, declaraciones y fotos para la galería, sino en la práctica); dos, su crítica ante el “balconeo” sudamericano frente al mundo que se nos ha venido encima y por último su contundencia respecto de que el camino para la equidad no se recorre sólo con gasto social sino generando “ciudadanía y gobiernos responsables”.

Al mismo tiempo que Mújica planteaba estas cuestiones y cuando ya en Buenos Aires le presentaba una serie de reclamos a la presidente Fernández sobre trabas comerciales que se están imponiendo a los productos uruguayos, tenía lugar Mendoza el primer “Congreso de Jóvenes de la Unasur”. Entre otros temas se debatió hacia dónde va América Latina y cómo impulsar la participación y  protagonismo de la juventud en la construcción de una región “sin exclusiones ni asimetrías”.

Inmersa en el seguimiento de estos asuntos volvió a sorprenderme el lema con el que el Congreso se anunciaba: “la unión es el camino hacia la patria grande”. Pensé  -para volcarlos luego en clave local – en los conceptos que implican los términos “balconeo”, “ciudadanía y gobiernos responsables”, “futuro y unión de América Latina” y “protagonismo (político y social) de los jóvenes”.

A lo largo de la semana en diversos actos de la presidente Fernández, se han hecho frecuentes y potentes alusiones a la juventud en lo concerniente a su participación militante y su papel como garante de la continuación del “modelo”. Observando  con cierta distancia, como hago yo, una se cuestiona numerosas veces a qué “juventud” y a qué “modelo” nos estamos refiriendo.

Por ejemplo,  al repasar los nombres y cargos de los participantes del Congreso de Mendoza dentro del panel “Integración, Jóvenes y Política” observé  (ciertamente defraudada) que todos pertenecían a corrientes kirchneristas o afines. No había un solo ponente de otras agrupaciones políticas o partidarias. ¿Permitirá ese sesgo tan manifiesto construir y formar a una juventud realmente progresista y democrática que además logre unificar Latinoamérica?; lo dudo ya que considero que los nuevos gobiernos, ciudadanías y regiones democráticas y responsables exigirán. (en realidad ya lo hacen), como rasgos fundamentales la capacidad de diálogo para llegar a entendimientos y la colaboración entre y desde distintas opciones (sean estas políticas, sociales o incluso religiosas y raciales).  Extrapolando esto no ya al escenario argentino sino al de toda América Latina, cuánto más difícil resultará construir esa “unión hacia la patria grande” si esta pretende conformarse, sin matices ni concesiones, de forma monocolor y uniforme. Será tarea imposible.

Todo esto me llevo a reflexionar también sobre si, quizás, la juventud militante de los grupos opositores argentinos “balconea” - como lo hace su propia dirigencia en muchas ocasiones -. Recuerdo que hace unos meses envié un conjunto de datos y su correspondiente análisis a una senadora opositora donde le señalaba insistentemente tanto ciertas “irregularidades” como el potencial que blogs, redes digitales y otras agrupaciones juveniles con las que el kirchnerismo contaba, tendrían en la conformación del tablero político y próximas elecciones presidenciales. Creo que nadie tuvo mucho en cuenta mi informe (al menos no he tenido constancia de que así fuera) pero tanto la presidente Fernández como los cuadros dirigentes oficialistas son, como yo lo era desde hace tiempo, muy conscientes de ello.

Cristina también se dirigió a los jóvenes esta semana en Miramar expresándoles compromiso con su militancia e instando a que los dirigentes políticos “predicaran con el ejemplo” para no traicionarles. La contradicción viene justo cuando, esos cuadros dirigentes, (y también muchos de los jóvenes militantes), día sí día también caen en maneras no sólo prepotentes o abusivas sino de “nuevos ricos” manejando recursos e información que no son de su propiedad sino de todos los argentinos. Por ejemplo, yo que imaginaba que “deportes para todos” era un gran plan de actividades deportiva (físicas, no vía televisión) para combatir la indolencia, problemas de drogas o incluso actividades delictivas de muchos jóvenes marginados socialmente, tuve que resignarme a que aquello consistiría finalmente en sentarse frente al televisor para contemplar una serie de espectáculos deportivos en los que se entremezclarán de forma burda (como ya sucede en el “fútbol para todos”),  avisos proselitistas pagados con el dinero de todos.

¿En eso consiste realmente esa Argentina más “abierta, participativa e igualitaria” que dice construir y reclama tanto la presidenta?; ¿es ese el derecho de acceso a la información de la ciudadanía que Cristina Fernández señala como el gran valor a proteger, mientras la AGN acumula denuncias contra el gobierno respecto de los obstáculos a la transparencia en los datos y la rendición de cuentas públicas?; ¿será eso también con  lo que se avanzará hacía un gobierno y una ciudadanía responsables que, como indicaba Mújica, se necesita con urgencia en América Latina? Dejo ahí las preguntas aunque yo me he respondido la mayoría negativamente y con relativa tristeza.

“Militar es trascender, esta es la enseñanza que Néstor nos dejó” explicaba en una carta de réplica a la Juventud Radical,  Matías Screpis de la Juventud Peronista de Junín. Yo me pregunto, ¿qué habrá querido decir con “trascender” aparte de pintar escuelas y murales, ondear banderas, ocupar algunos cargos o hacer “florecer mil flores”. No critico ni censuro lo anterior, pero lo considero absolutamente insuficiente al observar cómo poco o nada dicen esos mismos jóvenes afines al gobierno frente a los últimos escándalos (más bien supuestos delitos) de parte de la dirigencia sindical argentina, la falta total de coherencia entre los dichos y los hechos de muchos cargos oficialistas (tanto en lo público como en la esfera privada), la ausencia de transparencia y rendición de cuentas públicas, o sobre esa construcción del “tablero político” para vencer en las próximas elecciones que recae en viejos métodos tan poco democráticos y progresistas como fomentar y urdir internas, utilizar partidariamente decenas de actos, anuncios y recursos de todos y no sólo de unos, o habilitar colectoras para concentrar (como tantas veces)  en la provincia de Buenos Aires el “corazón” electoral que regirá el destino de un país entero. ¿Por qué se resignan a “balconear” frente a estos problemas graves,  perennes e irresueltos y no tratan de actuar contra ellos para de una vez por todas “trascenderlos”?

Todo lo señalado por Mújica como esas “convicciones y compromiso” que el Kirchnerismo presume no haber dejado desde el 2003 en la puerta de la Rosada  - y que desdice tantas veces con sus actos - como esa militancia juvenil y el resto de la sociedad que permanece ciertamente impasible frente a la corrupción, los abusos y muchos hechos graves, y que se debate en confrontaciones inútiles, no puede (mejor dicho no debería) seguir “balconeando” frente a estas y otras cuestiones que no permitirán transformar y unir el país o la región. Auguro más: ello jamás será posible si no se atacan los problemas y contradicciones de fondo e irresueltos, militen cuantos militen, se gaste el dinero público que se gaste, o gane quien gane las próximas elecciones.

martes, 8 de febrero de 2011

ME PREGUNTAN COMO ANDO

A través de una persona en Twitter que me mencionó la noticia y me envió un video, conocí que el cantautor Argentino Luna se encuentra internado y en grave estado de salud. El video que esta persona me envió se titula como uno de sus temas: "Me preguntan como ando".

En el momento en qué recibí el video, andaba consultando la prensa argentina. Una de las noticias que estaba leyendo, - una de tantas parecidas a muchas otras leídas a lo largo de este tiempo - , era esta:

"La Justicia investiga a José Fernando López, segundo de Julio De Vido. La fortuna del secretario de Obras Públicas creció siete veces desde 2003. Maneja $ 31.000 millones anuales desde su cargo en la Secretaría de Obras Públicas de la Nación. La denuncia fué por presunto enriquecimiento ilícito. López informó bienes por 158.900 pesos cuando llegó al gobierno en 2003, y en su última declaración jurada reconoce una fortuna de 1.109.815 pesos, un incremento del 698 % , según los datos que posee la Oficina Anticorrupción."

Efectivamente, como dice Argentino Luna... "ya somos muchos con bronca y se nos acaba el tiempo. Un puñado de "mal paridos" no puede ganar a un pueblo". NO LO PERMITAN MÁS TIEMPO!!.

ARGENTINO LUNA: "ME PREGUNTAN COMO ANDO"


viernes, 4 de febrero de 2011

VAMOS A CONTAR "MENTIRAS"

El otro día, al anunciar la Presidente Cristina Fernández un aumento jubilatorio, se mencionaron dos de las claves del "engaño" (dejemoslo en "medias verdades") al que se está sometiendo no sólo a los jubilados sino a gran parte de los trabajadores. 
1.- La Presidente destacó en su discurso que el aumento en las jubilaciones "colocaba a Argentina como el país de mejor cobertura social de toda Latinoamérica".
2.- Y como Ricardo Echegaray, sin duda,  va a ser propuesto a "Premio Nobel de Economía" del 2011, defendió que "si algo debe estar vinculado es que se paga según se recauda".  
Bien, si como dice la Presidente Argentina es el país de mejor cobertura social de toda America Latina, también es (exceptuando Venezuela) el de "mejor" inflación ( es decir el de mayor inflación). Si algo aumenta NOMINALMENTE pero decrece REALMENTE, no se cobra más... sino menos.
Y si como dice Echegaray, "se paga según se recauda" existe un método muy sencillo para revertir esta situación: dejar de cooptar recursos de los privados para trasladarlos al sector público y, posteriormente,  "hacer que se devuelven" a los privados. Quiero decir: si el Estado recaudara menos (Argentina es el país de mayor presión impositiva de toda Latinoamérica a excepción de Brasil) o recaudara de quiénes debe, no tendría que hacer luego el "paripé" de semi-devolver lo que primero arrebató.  
A largo plazo, tomar a la gente por tonta es el más claro signo de "tontuna" de quienes adoptan dicha actitud.
PD: Les invito a buscar datos sobre inflación, presión impositiva y poder adquisitivo real en los últimos años. Se van a sorprender de verdad.